Consiste en la utilización de un agente químico que acelera la exfoliación del extracto córneo (células muertas de la piel). Al realizarse un peeling se estimulan 3 actividades dentro de la piel según la profundidad:
1. Superficial: estimulación de la epidermis, lo que induce a una renovación del estado corneo y una reactivación del ciclo de recambio celular dérmico.
· Mejora arrugas finas.
· Unifica el tono desigual de la piel.
· Poros dilatados y acné leve.
· Mejora la sequedad cutánea aportando un brillo saludable.
2. Medio: eliminación de determinadas capas de la piel que presentan problemas específicos. Se sustituye la piel por una nueva más sana.
· Eliminación de manchas y queratosis solar.
· Atenuar las líneas de expresión más profundas.
3. Profundo: renovación completa de la dermis para conseguir la regeneración celular e incremento en la producción de colágeno.
· Arrugas profundas.
· Cicatrices de acné.
· Eliminación de lesiones precancerosas.
Así, clasificamos los tipos de peeling según la profundidad:
1. Superficial:
· Químicos: Enzimáticos, Ácido láctico, Ácido Glicolico, Mandélico, Resorcinol, TCA al 10%.
· Mecánicos: Ultrasónico, Dermoabrasión con punta de diamante.
2. Medio: Químicos: Ácido Retinoico, Ácido Salicílico, Jessner, TCA tricloroacético.
3. Profundo: Químicos: Fenol. Continuamente se están incorporando nuevas sustancias despigmentantes y combinaciones, como la Hidroquinona, Ácido Kójico, Ácido Azelaico, Vitamina C, extracto de regaliz soluble (Glabridina) y la Arbutina.
¿Cómo elegir el peeling adecuado?
Tan sólo el médico, con un estudio previo con la lámpara de Wood, es capaz de hacer un correcto diagnóstico del tipo de piel y su grosor, las distintas patologías y el fototipo del paciente. Y con ello, poder aconsejar el tipo de peeling adecuado, teniendo en cuenta la sustancia química a utilizar y su concentración.
Ventajas que proporciona el peeling:
· Disminución del grosor de la capa córnea.
· Rejuvenecimiento: reactivación del ciclo de recambio celular.
· Aclaración y luminosidad de la piel.
· Cierre de poros.
· Tersura en la piel.
· Hidratación.
· Unifica el tono desigual de la piel. Proporciona un color rosado saludable.
· Disminución o desaparición de la patología acnéica.
· Disminución o eliminación de arrugas, cicatrices de acné y manchas.
· Reactivación del proceso circulatorio.
· Reestructuración de las fibras colágenas y elásticas para lograr el efecto “lifting”.